Tecnología en las aulas: Cómo impacta en el aprendizaje y cuáles son los retos para las escuelas

En un mundo cada vez más digitalizado, la tecnología en la educación desde temprana edad se ha convertido en una aliada para preparar a las nuevas generaciones.

Y es que esta transformación puede moldear el aprendizaje y equipar a los niños con las habilidades necesarias para enfrentar los desafíos futuros.

Sin embargo, existen algunas consideraciones y desafíos que las escuelas deben tomar en cuenta según expertos en educación y docencia consultados por La República.

Michael Padilla, Coordinador del Colaboratorio para Acciones Investigativas en Mediación, Educación y Docencia, subraya la necesidad de una cuidadosa selección de las tecnologías para el aula, priorizando la seguridad y el impacto en el aprendizaje de los estudiantes.

"Es importante especificar cuál o cuáles tecnologías se tienen en mente al introducir en el aula, ya que no todas son adecuadas para todos los contextos educativos. Algunas tecnologías pueden promover el desarrollo cognitivo y el aprendizaje colaborativo, mientras que otras pueden presentar riesgos para la salud o interferir con el proceso de enseñanza", señaló Padilla.

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Por otro lado, Marlene Steuber, Consultora en Educación y Crianza, enfatiza la importancia de introducir la tecnología de manera equilibrada desde la infancia y destaca cómo el acceso a material educativo en línea puede enriquecer el aprendizaje, pero advierte sobre el riesgo de dependencia excesiva en las pantallas.

"La tecnología puede ser una herramienta poderosa en el proceso educativo, pero debemos asegurarnos de que se utilice de manera responsable y en equilibrio con otras formas de aprendizaje. Es esencial que los niños tengan experiencias concretas y de juego, ya que aprenden mejor a través de la interacción con otros", dijo la experta.

En este sentido, una adecuada capacitación docente y la supervisión continua de la integración tecnológica en el proceso educativo son fundamentales para generar un impacto positivo en los alumnos, concuerdan los expertos.

"La tecnología puede proporcionar nuevas oportunidades de aprendizaje y preparar a los estudiantes para enfrentar los desafíos del siglo XXI, sin embargo, es crucial que los educadores estén capacitados para integrar estas herramientas de manera efectiva en sus métodos de enseñanza", dijo Steuber.

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“Para adoptar herramientas tecnológicas como la inteligencia artificial, los educadores deben: evaluar su utilidad y limitaciones, comprender su funcionamiento básico, considerar la seguridad, experimentar con ellas, y evaluar constantemente su impacto en los estudiantes”, agregó Padilla.

Finalmente, este tipo de apoyos tecnológicos también permitirían un mejoramiento en la calidad de algunos servicios educativos donde se requiera, mediante la implementación de una educación más personalizada.

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