Logo La República

Martes, 17 de diciembre de 2024



COLUMNISTAS


Presidente del CNP falta a la verdad y evade responder los hallazgos del estudio de la UNA.

Leiner Vargas [email protected] | Martes 31 agosto, 2021


Quiero referirme a las manifestaciones del presidente ejecutivo del CNP realizadas en sus comunicados de prensa y referidas al estudio que recientemente publicamos en el CINPE de la Universidad Nacional, coordinado por este servidor y con la colaboración de dos compañeros más. He de empezar por decir que el estudio “Efectos del PAI en la cadena de valor del frijol en Costa Rica” se dio a conocer en agosto del 2021 y se realizó, entre febrero y Julio del 2021, es totalmente falso como ha querido decir el presidente del CNP que los datos del estudio sean del 2020 y que están desactualizados o que son objeto de la coyuntura de pandemia del 2020.

Es claro, además, que las autoridades del CNP evaden decir que los precios mencionados en el estudio atañen a la cosecha 2020-2021 y que los datos, sobre compras de frijol a productores por parte de las asociaciones no son de 38 mil colones promedio el quintal de frijol, cifra que es superior en 3 mil colones a los datos que los propios productores nos bridan al CINPE en las encuestas realizadas entre marzo y abril del 2021. Ahora, según sus propios datos, están vendiendo el frijol a más de 73 mil colones el quintal en este 2021 al PANEA, lo que sería más del doble de lo que en promedio le compran las asociaciones al productor nacional que es de 35 mil colones el quintal. La pregunta que nos hicimos en el estudio fue, ¿Quién se queda con ese margen y por qué?

Vuelve a faltar a la verdad el CNP y su Presidencia Ejecutiva cuando manifiesta que la encuesta total es de 40 personas entre todos los actores de la cadena entrevistados, cuando se entrevistó a 48 productores, 12 Asociaciones de Productores, 15 Juntas de Educación de la Región de Occidente y 35 funcionarios del CNP. Tampoco dice que de los 35 cuestionarios enviados a funcionarios del CNP, sólo se tuvieron 3 respuestas, 2 completas y una incompleta. De las respuestas y cuestionarios siempre tuvieron conocimiento desde junio anterior, sabían de todo y ahora aluden que se trata de información no correcta o que tenemos una muestra pequeña. Evaden decir que fueron ellos los que no respondieron las preguntas claves a los directores regionales y encargados del PAI, mismas que tuvimos que integrar a partir de los datos de las asociaciones y sobre todo, de las juntas de educación que nos respondieron de muy buena forma sobre el sobre precio de los bienes comercializados por el PAI y sobre todo, de los grandes márgenes de intermediación en el frijol.

Los datos se presentan en el estudio con toda transparencia y se ponen como ejemplo de las valoraciones de precio de unos y otros actores en la cadena de valor del frijol, no se hace una afirmación de que sea estadísticamente significativo, dado que el interés del estudio era verificar ¿a qué precio se estaba comprando la cosecha de frijol? y ¿a qué precio se vendía al CNP? En nuestra investigación preguntamos sobre los márgenes de comercialización del CNP y de las asociaciones a los funcionarios de las regiones y a los directivos y altos cargos del PAI y su respuesta fue, que eran fijados por reglamento, según una fórmula interna. Sin embargo, cuando hicimos los cálculos comparando con la situación del mercado, logramos evidenciar alrededor de un 25 por ciento de sobre precio en el caso del frijol rojo y una suma un poco inferior, para el frijol negro.

Es totalmente falso y falto a la verdad el uso de la palabra conveniencia en el muestreo, se trata de un muestreo regional del área de occidente, para poder abarcar a los destinatarios del PANEA, programa del Ministerio de Educación MEP que efectivamente es el principal comprador del PAI en el 2021. Datos del propio CNP muestran que el 63 por ciento de las ventas del PAI van al PANEA y son esencialmente, para abastecer a las Juntas de Educación en su labor de repartir alimentos producto de la Pandemia. Datos del CNP dicen que las Juntas de educación tienen superávit de muchos 15 mil millones de colones gracias al PAI, elemento totalmente falso y contradictorio. Los excedentes de las juntas de educación no por el CNP son por una clara sobre presupuestación del PANEA con precios de referencia más altos y, sobre todo, por la sumatoria de factores imprevistos, paquetes o centros educativos dónde no se entregó el producto. Por el contrario, nosotros estimamos que, si se hubiese comprado los frijoles al mismo proveedor del PAI en los precios del supermercado, el monto de ahorro en sólo ese rubro habría sido de alrededor de 4.3 millones de dólares para el año 2020. Lamentablemente las propias asociaciones venden sus marcas de frijol hasta un 30 por ciento más barato en los supermercados que los precios que paga las Juntas de Educación al PAI. Así es costarricenses, pongan atención a esto, la misma marca comprada por el PAI vende en un supermercado de occidente a precios 30 por ciento más bajos que los precios del PAI al PANEA.

Adicionalmente, nuestro estudio demuestra con datos claros que el PAI compró frijol importado para abastecer al PANEA y otros clientes del sector público, con márgenes de comercialización aún más altos, debido a que las importaciones de frijol rojo de Nicaragua llegan al país claramente a precios más bajos que los frijoles producidos por nuestros agricultores. Tenemos en nuestro haber datos del TICA y del sistema de Comercio Exterior de Nicaragua que demuestran que efectivamente la Asociación VERACRUZ está importando frijol rojo desde Nicaragua, a pesar de decir en su propaganda y “engañar al PAI y al CNP”, con precios y marcas que se dicen 100 por ciento frijoles nacionales.

Dicen las autoridades del CNP que compran a los agricultores organizados en asociaciones cerca de 30 mil quintales de frijol y en sus demandas del PAI tienen alrededor de 147 mil quintales, la diferencia claramente no es casualidad y tampoco son poca cosa, claramente el mercado institucional se está desvirtuando a favor del frijol importado y mediante el uso de intermediarios y comerciantes que están recibiendo sobreprecios por parte del CNP. Lastimosamente mientras eso pasa, muchos pequeños productores de frijol siguen esperando la ayuda del PAI y las autoridades del MAG y del MEP se hacen de la vista gorda.

Según manifiesta el CNP, sus compras de frijol son actualmente a 1300 colones por una bolsa de frijol de 800 gramos, es decir, un kilo de frijol del CNP les costaría a los comedores escolares la suma de 1620 colones. Tengo en mi poder las ofertas de frijol de distintas marcas del mercado nacional, una en particular de la marca Veracruz, comprada en Coopeatenas, dónde el costo del mismo frijol, 800 gramos cuestan 955 colones, incluyendo el IVA del 1 por ciento y el margen del distribuidor de al menos un 10 por ciento. Esto quiere decir que la marca Veracruz está claramente vendiendo con un sobreprecio de 35 por ciento adicional al PAI. Tengo ofertas de frijoles que van desde 900 hasta 1400 colones el kilo a lo largo del país, con industriales que compran tanto frijol nacional como importado. ¿Qué clase de negocio es ese?, dónde se ha visto que los funcionarios del CNP se prestan para proteger a un comercializador de frijol importado a nombre de una política pública, a pesar de que se escude detrás de una marca comercial de una asociación de productores.

¿Dónde queda el papel de mayorista del PAI?, que compra magnitudes gigantescas de frijol (147 mil quintales en el año 2020) a precios 30 por ciento superiores, comparados con el precio al menudeo de la misma marca de frijoles Veracruz, utilizada en este ejemplo. Estoy seguro de que, con las magnitudes de frijoles compradas, el segmento importado podría recibir ofertas muy superiores por parte de empresas nacionales dedicadas a la comercialización del frijol importado. No se vale señores del PAI, aducir que ustedes desconocen lo que está pasando, cobran hasta un 12 por ciento por la labor comercial y saben muy bien que no están haciendo bien su trabajo.

El negocio es aún más redondo, cuando los propios funcionarios del CNP intimidan a detallistas en todo el país, a que deben comprar solamente marcas específicas de frijol, para que ellos, a través del PANEA, cedan la compra de los diarios adquiridos para los niños del país y vendidos por el CNP a dichos comercios. Es un negocio redondo en el que forman parte los intermediarios de la cadena de frijol y se hacen de la vista gorda los funcionarios de ambos ministerios, el MEP y su programa PANEA y el CNP, cuya rectoría se encuentra a cargo del Ministerio de Agricultura. Señora ministra de Educación, pare usted esa barbaridad, señor ministro de Agricultura, déjese de habladas sin sentido y haga una intervención inmediata del programa PAI.

He recibido llamadas de asociaciones de productores que tienen atrasos de hasta 6 meses en pago de facturas de frijoles, he recibido quejas de concentración de la cuota de compras del PAI en una asociación del sur del país, casualmente muy cercana a las autoridades superiores del CNP. He recibido quejas de productores en la región Huetar Norte, que se les ha rechazado la compra de su cosecha por parte de las autoridades del CNP en la región. Así la cosa, parece que en el CNP acostumbran a enviar cortinas de humo, cuando se hacen de la vista gorda de estas importantes irregularidades de su programa PAI.

Como investigador universitario he ofrecido a todos los actores el estudio y quisiera dejar claro que mi interés es que se preserve el apoyo a los pequeños productores nacionales y que tengan, un precio justo, sobre todo aquellos que representan al campesinado de las regiones más lejanas y con escasa capacidad de llegar al mercado. Pero no se vale, seguir justificándose con el sudor de nuestros campesinos para aprovecharse del presupuesto de nuestros niños y sus comedores escolares. Reto públicamente a las autoridades del CNP y del PANEA en el Ministerio de Educación y a sus jerarcas a que rindan cuentas claras de lo que han venido haciendo con el dinero público que administran y, sobre todo, con lo presupuestado para nuestros niños y su alimentación. Tal como reza la frase de nuestro escudo en la Universidad, “la verdad nos hace libres”.

NOTAS ANTERIORES


Comunicar, comunicar, comunicar

Viernes 13 diciembre, 2024

Defenderse es más peligroso que dar un paso al frente y contar lo que sea necesario y que sabemos que los públicos quieren saber.







© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.