Rodrigo Chaves llama charlatanes a diputados y asegura que patean el tarro para no votar ley jaguar
Para el mandatario no hay obstáculos legales para avanzar con el debate y votación del referendo.
Esteban Arrieta [email protected] | Miércoles 07 agosto, 2024 02:26 p. m.
El que quiere busca la forma, el que no, busca excusas.
Usando esta frase de sabiduría popular, el presidente Rodrigo Chaves acusó hoy a los diputados de "patear el tarro" en torno al referéndum jaguar para el desarrollo nacional.
El mandatario explicó que no hay razones técnicas para oponerse a la votación en el Congreso, ya que el Poder Ejecutivo retiró el proyecto de ley que fue declarado ilegal por la Sala IV sobre este tema y, en su lugar, lo sustituyó por una nueva iniciativa que eliminó los artículos considerados ilegales.
De esta manera, todos los argumentos para retrasar el avance de la iniciativa son propios de mala fe o charlatanería.
“En un acto de agilidad política, intelectual y jurídica, al día siguiente del por tanto de la Sala IV, nosotros anunciamos una ley jaguar 2.0 y en una semana y un día, hemos visto la enorme abundancia de comentarios, engaños e inducción al error, de parte de los defensores del status quo y enemigos del progreso. Hoy nos toca aclarar las cosas que por ignorancia o mala fe. El que quiere busca la forma, el que no, busca una excusa. Están pateando el tarro y dando argumentos de charlatanes. Son charlatanes”, dijo Chaves.
Lea más: Referéndum Jaguar 2.0 es una venta de humo: Antonio Ortega del Frente Amplio
El mandatario advirtió una vez más que, en caso de que el Congreso no tome una decisión sobre este tema, cuando lleguen las elecciones nacionales en 2026, los costarricenses cobrarán las cuentas en las urnas.
“Los estamos viendo, estamos llevando la contabilidad. Aquí está el fusil y cuando se vence el plazo vamos a cobrar”, dijo Chaves, señalando un lapicero y haciendo referencia a las próximas elecciones presidenciales.
La Ley Jaguar para el Desarrollo Nacional que presentó el presidente Chaves la semana pasada implica un referéndum antes de las elecciones presidenciales del 2026 y se centrará solo en un puñado de temas.
Se trata básicamente de una reforma de la ley que cobija a la Contraloría General, el desarrollo de Ciudad Gobierno y la Marina y Terminal de Cruceros de Limón.
La propuesta de ley modifica la ley de contratación administrativa y aclara normas y competencias de la Contraloría General.
En caso de que la Asamblea no le dé los 29 votos que se requieren para avanzar con la consulta, se hará el referéndum por medio del mecanismo de iniciativa popular, por lo que se buscará la firma del 5% del padrón electoral.
